[parteII]
20 (Al músico principal. Salmo de David)
1 Jehovah te responda en el día de angustia;
el nombre del Dios de Jacob te defienda.
2 El te envíe ayuda desde su santuario,
y te sostenga desde Sion.
3 Tenga él memoria de tus ofrendas
y acepte tu holocausto. (Selah)
4 El te dé conforme a tu corazón,
y cumpla todos tus planes.
5 Nosotros nos alegraremos por tu salvación,
y en el nombre de nuestro Dios alzaremos bandera.
Cumpla Jehovah todos tus anhelos.
6 Ahora reconozco que Jehovah da la victoria a su ungido;
le responderá desde su santo cielo
con la fuerza liberadora de su diestra.
7 Estos confían en carros,
y aquéllos en caballos;
pero nosotros confiamos
en el nombre de Jehovah nuestro Dios.
8 Ellos se doblegan y caen,
pero nosotros nos levantamos y estamos firmes.
9 ¡Salva, oh Jehovah!
¡Que el Rey nos oiga el día en que le invoquemos!
Jehovah da vida y liberación
21 (Al músico principal. Salmo de David)
1 ¡Oh Jehovah, el rey se alegra en tu poder!
¡Cuánto se goza en tu salvación!
2 Le has concedido el deseo de su corazón,
y no le has negado la petición de sus labios. (Selah)
3 Le has salido al encuentro con las mejores bendiciones;
corona de oro fino has puesto sobre su cabeza.
4 Te pidió vida, y se la concediste;
vida extensa, eternamente y para siempre.
5 Gloria grande halla en tu liberación;
honra y esplendor has puesto sobre él.
6 Porque le has dado bendiciones para siempre,
y le has colmado con la alegría de tu rostro.
7 Por eso el rey confía en Jehovah;
por la misericordia del Altísimo no será removido.
8 Tu mano alcanzará a todos tus enemigos;
tu diestra alcanzará a los que te aborrecen.
9 Los pondrás como horno de fuego
en el tiempo en que te presentes.
Jehovah los destruirá en su furor,
y el fuego los consumirá.
10 Destruirás el fruto de ellos en la tierra;
sus descendientes, de entre los hijos del hombre.
11 Porque se volvieron contra ti para hacerte daño;
idearon maquinaciones, pero no prevalecerán.
12 En la cuerda de tu arco alistarás las flechas contra sus caras;
ciertamente les harás volver las espaldas.
13 ¡Enaltécete, oh Jehovah, con tu poder!
Cantaremos y alabaremos tu poderío.
Testimonio de sufrimiento y victoria
22 (Al músico principal. Sobre Ayélet ha-sájar. Salmo de David)
1 ¡Dios mío, Dios mío!
¿Por qué me has desamparado?
¿Por qué estás tan lejos de mi salvación
y de las palabras de mi clamor?
2 Dios mío, clamo de día, y no respondes;
clamo de noche, y no hay sosiego para mí.
3 Pero tú eres santo.
¡Tú, que habitas entre las alabanzas de Israel!
4 Nuestros padres esperaron en ti:
Esperaron, y tú los libraste.
5 Clamaron a ti y fueron librados;
confiaron en ti y no fueron defraudados.
6 Pero yo soy un gusano y no un hombre,
objeto de la afrenta de los hombres y despreciado del pueblo.
7 Todos los que me ven se burlan de mí.
Estiran los labios y mueven la cabeza diciendo:
8 "En Jehovah confió; que él lo rescate.
Que lo libre, ya que de él se agradó."
9 Pero tú eres el que me sacó del vientre;
me has hecho estar confiado desde que estaba a los pechos de mi madre.
10 Sobre ti fui echado desde la matriz;
desde el vientre de mi madre,
tú eres mi Dios.
11 No te alejes de mí,
porque la angustia está cerca,
y no hay quien ayude.
12 Muchos toros me han rodeado;
fuertes toros de Basán me han cercado.
13 Contra mí abrieron sus bocas,
como león voraz y rugiente.
14 Soy derramado como el agua;
todos mis huesos se han desarticulado.
Mi corazón está como cera
y se ha derretido en medio de mis entrañas.
15 Mi vigor se ha secado como un tiesto,
y mi lengua se ha pegado a mi paladar.
Me has puesto en el polvo de la muerte.
16 Los perros me han rodeado;
me ha cercado una pandilla de malhechores,
y horadaron mis manos y mis pies.
17 Puedo contar todos mis huesos;
ellos me miran y me observan.
18 Reparten entre sí mis vestidos,
y sobre mi ropa echan suertes.
19 Pero tú, oh Jehovah, no te alejes.
Fortaleza mía, apresúrate para ayudarme.
20 Libra mi alma de la espada;
libra mi única vida de las garras de los perros.
21 Sálvame de la boca del león
y de los cuernos de los toros salvajes.
¡Me has respondido!
22 Anunciaré tu nombre a mis hermanos;
en medio de la congregación te alabaré.
23 Los que teméis a Jehovah, alabadle;
glorificadle, todos los descendientes de Jacob.
Temedle vosotros, todos los descendientes de Israel.
24 Porque no despreció ni desdeñó la aflicción del afligido,
ni de él escondió el rostro.
Más bien, le oyó cuando clamó a él.
25 Tuya es mi alabanza en la gran congregación.
Mis votos pagaré delante de los que le temen.
26 Los pobres comerán y serán saciados.
Alabarán a Jehovah los que le buscan.
¡Que viva vuestro corazón para siempre!
27 Ellos se acordarán y volverán a Jehovah
de todos los confines de la tierra.
Delante de ti se postrarán
todas las familias de las naciones.
28 Porque de Jehovah es el reino,
y él se enseñoreará de las naciones.
29 Ciertamente ante él se postrarán todos los ricos de la tierra.
Se doblegarán ante él todos los que descienden al polvo,
los que no pueden conservar la vida a su propia alma.
30 La posteridad le servirá;
esto le será referido al Señor por generaciones.
31 Vendrán y anunciarán su justicia a un pueblo que ha de nacer:
"¡El hizo esto!"
Jehovah: el buen pastor
23 (Salmo de David)
1 Jehovah es mi pastor;
nada me faltará.
2 En prados de tiernos pastos
me hace descansar.
Junto a aguas tranquilas me conduce.
3 Confortará mi alma
y me guiará por sendas de justicia
por amor de su nombre.
4 Aunque ande en valle de sombra de muerte,
no temeré mal alguno,
porque tú estarás conmigo.
Tu vara y tu cayado me infundirán aliento.
5 Preparas mesa delante de mí
en presencia de mis adversarios.
Unges mi cabeza con aceite;
mi copa está rebosando.
6 Ciertamente el bien y la misericordia
me seguirán todos los días de mi vida,
y en la casa de Jehovah
moraré por días sin fin.
Jehovah: el Rey de gloria
24 (Salmo de David)
1 De Jehovah es la tierra y su plenitud,
el mundo y los que lo habitan.
2 Porque él la fundó sobre los mares
y la afirmó sobre los ríos.
3 ¿Quién subirá al monte de Jehovah?
¿Quién permanecerá en su lugar santo?
4 El limpio de manos y puro de corazón,
que no ha elevado su alma a la vanidad
ni ha jurado con engaño.
5 El recibirá la bendición de Jehovah,
y la justicia del Dios de su salvación.
6 Tal es la generación de los que le buscan,
de los que buscan tu rostro,
oh Dios de Jacob. (Selah)
7 ¡Levantad, oh puertas, vuestras cabezas!
Levantaos, oh puertas eternas,
y entrará el Rey de gloria.
8 ¿Quién es este Rey de gloria?
¡Jehovah, el fuerte y poderoso!
¡Jehovah, el poderoso en la batalla!
9 ¡Levantad, oh puertas, vuestras cabezas!
Levantaos, oh puertas eternas,
y entrará el Rey de gloria.
10 ¿Quién es este Rey de gloria?
¡Jehovah de los Ejércitos!
¡El es el Rey de gloria! (Selah)
Plegaria en medio de la aflicción
25 (Salmo de David)
1 A ti, oh Jehovah,
levantaré mi alma.
2 ¡Dios mío, en ti confío!
No sea yo avergonzado.
No triunfen sobre mí mis enemigos.
3 Ciertamente ninguno de los que confían en ti será avergonzado.
Serán avergonzados los que se rebelan sin causa.
4 Muéstrame, oh Jehovah, tus caminos;
enséñame tus sendas.
5 Encamíname en tu verdad y enséñame,
porque tú eres el Dios de mi salvación.
En ti he esperado todo el día.
6 Acuérdate, oh Jehovah,
de tu compasión y de tu misericordia, que son perpetuas.
7 No te acuerdes de los pecados de mi juventud ni de mis rebeliones.
Conforme a tu misericordia
acuérdate de mí, por tu bondad, oh Jehovah.
8 Bueno y recto es Jehovah;
por eso él enseñará a los pecadores el camino.
9 Encaminará a los humildes en la justicia
y enseñará a los humildes su camino.
10 Todas las sendas de Jehovah son misericordia y verdad
para con los que guardan su pacto y sus testimonios.
11 Por amor de tu nombre, oh Jehovah,
perdona también mi iniquidad,
porque es grande.
12 ¿Qué hombre es el que teme a Jehovah?
El le enseñará el camino que ha de escoger.
13 Su alma reposará en bienestar,
y sus descendientes heredarán la tierra.
14 El secreto de Jehovah es para los que le temen;
a ellos hará conocer su pacto.
15 Mis ojos están siempre puestos en Jehovah,
porque él sacará mis pies de la red.
16 Mírame y ten misericordia de mí,
porque estoy solitario y afligido.
17 Las angustias de mi corazón se han aumentado;
sácame de mis congojas.
18 Mira mi aflicción y mis afanes;
perdona todos mis pecados.
19 Mira cómo se han multiplicado mis enemigos,
y con odio violento me aborrecen.
20 Guarda mi alma y líbrame;
no sea yo avergonzado,
porque en ti me he refugiado.
21 La integridad y la rectitud me guarden,
porque en ti he esperado.
22 Redime, oh Dios, a Israel
de todas sus angustias.
Oración del que anda en integridad
26 (Salmo de David)
1 Hazme justicia, oh Jehovah,
porque yo en mi integridad he andado.
Asimismo, he confiado en Jehovah;
no vacilaré.
2 Examíname, oh Jehovah, y pruébame.
Purifica mi conciencia y mi corazón;
3 porque tu misericordia está delante de mis ojos,
y camino en tu verdad.
4 No me he sentado con los hombres falsos
ni tengo tratos con los hipócritas.
5 Aborrezco la reunión de los malhechores;
nunca me he sentado con los impíos.
6 Lavaré mis manos en inocencia,
e iré alrededor de tu altar, oh Jehovah,
7 para proclamar con voz de agradecimiento
y contar todas tus maravillas.
8 Oh Jehovah, he amado la habitación de tu casa,
el lugar de la morada de tu gloria.
9 No recojas mi alma junto con los pecadores,
ni mi vida con los hombres sanguinarios,
10 en cuyas manos hay infamia,
y cuya mano derecha está llena de soborno.
11 Pero yo andaré en mi integridad;
redímeme y ten misericordia de mí.
12 Mis pies se han afirmado en suelo llano;
en las congregaciones te bendeciré, oh Jehovah.
La confianza del que busca a Jehovah
27 (Salmo de David)
1 Jehovah es mi luz y mi salvación;
¿de quién temeré?
Jehovah es la fortaleza de mi vida;
¿de quién me he de atemorizar?
2 Cuando se acercaron a mí los malhechores,
mis adversarios y mis enemigos,
para devorar mis carnes,
tropezaron y cayeron.
3 Aunque acampe un ejército contra mí,
mi corazón no temerá.
Aunque contra mí se levante guerra,
aun así estaré confiado.
4 Una cosa he pedido a Jehovah;
ésta buscaré:
que more yo en la casa de Jehovah
todos los días de mi vida,
para contemplar la hermosura de Jehovah,
y para inquirir en su templo.
5 Porque en su enramada me esconderá en el día del mal;
me ocultará en lo reservado de su tabernáculo;
me pondrá en alto sobre una roca.
6 Ahora levantará mi cabeza
sobre mis enemigos que me rodean,
y en su tabernáculo ofreceré sacrificios de júbilo.
Cantaré y entonaré salmos a Jehovah.
7 Escucha, oh Jehovah,
mi voz con que clamo a ti.
Ten misericordia de mí y respóndeme.
8 Mi corazón ha dicho:
"Buscad su rostro."
¡Tu rostro buscaré, oh Jehovah!
9 No escondas de mí tu rostro;
no apartes con ira a tu siervo.
Tú has sido mi ayuda;
no me dejes ni me desampares,
oh Dios de mi salvación.
10 Aunque mi padre y mi madre me dejen,
con todo, Jehovah me recogerá.
11 Enséñame, oh Jehovah, tu camino;
guíame por sendas de rectitud
a causa de los que me son contrarios.
12 No me entregues a la voluntad de mis adversarios,
porque contra mí se han levantado
testigos falsos que respiran violencia.
13 ¡Oh, si yo no creyese que he de ver la bondad de Jehovah
en la tierra de los vivientes!
14 Espera en Jehovah.
Esfuérzate, y aliéntese tu corazón.
¡Sí, espera en Jehovah!
Jehovah escucha la oración
28 (Salmo de David)
1 A ti clamaré, oh Jehovah;
Roca mía, no te hagas sordo para conmigo.
No suceda que por quedarte en silencio ante mí,
yo llegue a ser semejante a los que descienden a la fosa.
2 Escucha la voz de mis ruegos cuando clamo a ti,
cuando alzo mis manos hacia tu lugar santísimo.
3 No me arrastres junto con los impíos,
con los que hacen iniquidad,
los cuales hablan de paz a su prójimo,
pero la maldad está en su corazón.
4 Dales conforme a sus hechos
y conforme a la maldad de sus actos.
Dales conforme a la obra de sus manos.
¡Dales su recompensa!
5 Porque no atendieron a los hechos de Jehovah,
ni a la obra de sus manos,
él los derribará y no los volverá a edificar.
6 Bendito sea Jehovah,
que oyó la voz de mis ruegos.
7 Jehovah es mi fuerza y mi escudo;
en él esperó mi corazón.
Fui ayudado, y se gozó mi corazón;
con mi canción le alabaré.
8 Jehovah es la fuerza de su pueblo,
la fortaleza de salvación para su ungido.
9 Salva a tu pueblo y bendice a tu heredad;
pastoréalos y enaltécelos para siempre.
La voz de Jehovah en la tormenta
29 (Salmo de David)
1 Dad a Jehovah, oh hijos de los fuertes;
dad a Jehovah la gloria y el poder.
2 Dad a Jehovah la gloria debida a su nombre.
Adorad a Jehovah en la hermosura de la santidad.
3 Voz de Jehovah sobre las aguas:
¡Truena el Dios de gloria!
¡Es Jehovah sobre las caudalosas aguas!
4 Voz de Jehovah con poder;
voz de Jehovah con gloria.
5 Voz de Jehovah que quiebra los cedros;
Jehovah despedaza los cedros del Líbano.
6 Los hace saltar como terneros;
al Líbano y al Sirión hizo saltar
como crías de toros salvajes.
7 Voz de Jehovah que aviva las llamas de fuego.
8 Voz de Jehovah que estremece al desierto.
Jehovah estremece al desierto de Cades.
9 La voz de Jehovah estremece las encinas y desnuda los bosques.
Y en su templo todos los suyos proclaman su gloria.
10 Jehovah se sentó ante el diluvio;
Jehovah se sentó como rey para siempre.
11 Jehovah dará fortaleza a su pueblo;
Jehovah bendecirá a su pueblo con paz.
Alabanza al Dador de la vida
30 (Salmo. Cántico para la dedicación del templo. De David)
1 Te glorificaré, oh Jehovah,
porque me has levantado
y no has dejado que mis enemigos se alegren de mí.
2 Oh Jehovah, Dios mío, a ti clamé,
y me sanaste.
3 Oh Jehovah, tú has hecho subir mi alma del Seol;
me has dado vida para que no descienda a la fosa.
4 Cantad a Jehovah, vosotros sus fieles;
celebrad la memoria de su santidad.
5 Porque su ira dura sólo un momento,
pero su favor dura toda la vida.
Por la noche dura el llanto,
pero al amanecer vendrá la alegría.
6 Yo dije en medio de mi tranquilidad:
"No seré movido jamás."
7 Tú, oh Jehovah, por tu buena voluntad
estableciste mi monte con poder.
Pero escondiste tu rostro, y quedé turbado.
8 A ti, oh Jehovah, invocaré;
al Señor suplicaré:
9 "¿Qué provecho hay en mi muerte,
cuando descienda a la sepultura?
¿Te alabará el polvo?
¿Anunciará tu verdad?
10 Escucha, oh Jehovah, y ten misericordia de mí;
Jehovah, sé tú mi ayudador."
11 Has convertido mi lamento en una danza;
quitaste mi vestido de luto y me ceñiste de alegría.
12 Por eso mi alma te cantará y no callará.
Oh Jehovah, Dios mío, te alabaré para siempre.
Declaración de confianza en Jehovah
31 (Al músico principal. Salmo de David)
1 En ti, oh Jehovah, me he refugiado;
no sea yo avergonzado jamás.
Líbrame en tu justicia.
2 Inclina a mí tu oído; líbrame pronto.
Sé tú mi roca fuerte,
mi fortaleza para salvarme.
3 Porque tú eres mi roca y mi fortaleza,
por amor de tu nombre me guiarás
y me encaminarás.
4 Sácame de la red que han escondido para mí,
porque tú eres mi fortaleza.
5 En tus manos encomiendo mi espíritu;
tú me has redimido, oh Jehovah, Dios de verdad.
6 Aborrezco a los que esperan en los ídolos vanos,
pero yo en Jehovah he confiado.
7 Me gozaré y alegraré en tu misericordia,
porque has visto mi aflicción.
Has conocido mi alma en las angustias
8 y no me entregaste en mano del enemigo.
Hiciste que mis pies se posasen en lugar espacioso.
9 Ten misericordia de mí, oh Jehovah,
porque estoy en angustia.
Mis ojos, mi alma y mis entrañas
se han debilitado por el pesar.
10 Porque mi vida se va gastando de dolor,
y mis años de suspirar.
Mi fuerza me falla a causa de mi iniquidad,
y mis huesos se han debilitado.
11 Para todos mis enemigos he sido objeto de oprobio.
He sido objeto de horror para mis vecinos,
y de miedo para mis conocidos.
Los que me veían huían de mí.
12 He sido olvidado en sus corazones como un muerto;
he venido a ser como un objeto inútil.
13 Porque he oído la calumnia de muchos;
el terror está por todas partes,
mientras traman unidos contra mí,
y planean quitarme la vida.
14 Pero yo he confiado en ti, oh Jehovah.
He dicho: "Tú eres mi Dios;
15 en tus manos están mis tiempos."
Líbrame de la mano de mis enemigos
y de mis perseguidores.
16 Haz resplandecer tu rostro sobre tu siervo;
sálvame por tu misericordia.
17 Oh Jehovah, no sea yo avergonzado,
ya que te he invocado.
Sean avergonzados los impíos;
desciendan en silencio al Seol.
18 Enmudezcan los labios mentirosos
que hablan insolencias contra el justo,
con soberbia y desprecio.
19 ¡Cuán grande es la bondad
que has guardado para los que te temen,
que has obrado para los que en ti se refugian contra los hijos del hombre.
20 En el refugio de tu presencia
los esconderás de la conspiración del hombre.
En un tabernáculo los guardarás
de las contiendas de la lengua.
21 ¡Bendito sea Jehovah!
Porque ha hecho maravillosa su misericordia para conmigo en ciudad fortificada.
22 En mi apresuramiento yo dije:
"¡Cortado soy de tu presencia!"
Pero cuando clamé a ti,
oíste la voz de mis ruegos.
23 Amad a Jehovah, todos vosotros sus santos.
A los fieles guarda Jehovah,
pero retribuye en abundancia al que actúa con soberbia.
24 Esforzaos, todos vosotros los que esperáis en Jehovah,
y tome aliento vuestro corazón.
Experiencia de la dicha del perdón
32 (Salmo de David. Masquil)
1 Bienaventurado aquel
cuya transgresión ha sido perdonada,
y ha sido cubierto su pecado.
2 Bienaventurado el hombre a quien Jehovah no atribuye iniquidad,
y en cuyo espíritu no hay engaño.
3 Mientras callé, se envejecieron mis huesos en mi gemir, todo el día.
4 Porque de día y de noche se agravó sobre mí tu mano;
mi vigor se convirtió en sequedades de verano. (Selah)
5 Mi pecado te declaré
y no encubrí mi iniquidad.
Dije: "Confesaré mis rebeliones a Jehovah."
Y tú perdonaste la maldad de mi
pecado. (Selah)
6 Por eso orará a ti todo fiel
en el tiempo en que puedas ser hallado.
Ciertamente en la inundación las caudalosas aguas no llegarán a él.
7 Tú eres mi refugio;
me guardarás de la angustia
y con cánticos de liberación me rodearás. (Selah)
8 "Te haré entender y te enseñaré
el camino en que debes andar.
Sobre ti fijaré mis ojos.
9 No seáis sin entendimiento,
como el caballo, o como el mulo,
cuya boca ha de ser frenada con rienda y freno;
de otro modo, no se acercan a ti."
10 Muchos dolores tendrá el impío;
pero la misericordia cercará al que espera en Jehovah.
11 Oh justos, alegraos en Jehovah y gozaos;
cantad con júbilo, todos los rectos de corazón.
Alabanza al Dios creador y providente
33 1 Alegraos, oh justos, en Jehovah;
a los rectos es hermosa la alabanza.
2 Dad gracias a Jehovah con lira;
cantadle con arpa de diez cuerdas.
3 Cantadle un cántico nuevo;
hacedlo bien, tocando con júbilo.
4 Porque recta es la palabra de Jehovah,
y toda su obra ha sido hecha con verdad.
5 El ama la justicia y el derecho;
de la misericordia de Jehovah está llena la tierra.
6 Por la palabra de Jehovah fueron hechos los cielos;
todo el ejército de ellos fue hecho por el soplo de su boca.
7 El junta como un montón las aguas de los mares,
y guarda en depósitos los océanos.
8 Tema a Jehovah toda la tierra;
témanle todos los habitantes del mundo.
9 Porque él dijo, y fue hecho;
él mandó, y existió.
10 Jehovah hace nulo el consejo de las naciones,
y frustra las maquinaciones de los pueblos.
11 El consejo de Jehovah permanecerá para siempre,
y los pensamientos de su corazón,
por todas las generaciones.
12 ¡Bienaventurada la nación de la cual Jehovah es Dios,
el pueblo al cual escogió como posesión suya!
13 Jehovah ve desde los cielos;
mira a todos los hijos del hombre.
14 Desde el lugar de su morada observa
a todos los habitantes de la tierra.
15 El que formó el corazón de todos ellos
comprende todas sus obras.
16 El rey no es librado por la multitud del ejército;
el valiente no escapa por su mucha fuerza.
17 Vano es el caballo para la victoria,
y a pesar de su gran fuerza, no podrá librar.
18 El ojo de Jehovah está sobre los que le temen,
sobre los que esperan en su misericordia,
19 para librar sus almas de la muerte
y para darles vida en tiempos de hambre.
20 Nuestra alma espera en Jehovah:
El es nuestra ayuda y nuestro escudo.
21 Por eso, nuestro corazón se alegra en él,
porque en su santo nombre hemos confiado.
22 Sea tu misericordia, oh Jehovah, sobre nosotros,
según lo esperamos de ti.
Evidencias de la bondad de Jehovah
34 (Salmo de David, cuando cambió su conducta ante Abimelec, y éste lo echó, y él se fue)
1 Bendeciré a Jehovah en todo tiempo;
su alabanza estará siempre en mi boca.
2 En Jehovah se gloriará mi alma;
lo oirán los mansos y se alegrarán.
3 Engrandeced a Jehovah conmigo;
ensalcemos juntos su nombre.
4 Yo busqué a Jehovah, y él me oyó,
y de todos mis temores me libró.
5 Los que a él miran son iluminados;
sus rostros no serán avergonzados.
6 Este pobre clamó, y Jehovah le escuchó
y lo libró de todas sus angustias.
7 El ángel de Jehovah acampa en derredor de los que le temen, y los libra.
8 Probad y ved que Jehovah es bueno.
¡Bienaventurado el hombre que se refugia en él!
9 Temed a Jehovah, vosotros sus santos,
porque nada falta a los que le temen.
10 Los leones tienen necesidades y sufren hambre,
pero los que buscan a Jehovah
no tendrán falta de ningún bien.
11 Venid, oh hijos, escuchadme;
el temor de Jehovah os enseñaré:
12 ¿Quién es el hombre que desea vida?
¿Quién anhela años para ver el bien?
13 Guarda tu lengua del mal,
y tus labios de hablar engaño.
14 Apártate del mal y haz el bien;
busca la paz y síguela.
15 Los ojos de Jehovah están sobre los justos;
sus oídos están atentos a su clamor.
16 El rostro de Jehovah está contra los que hacen mal,
para cortar de la tierra su memoria.
17 Clamaron los justos, y Jehovah los oyó;
los libró de todas sus angustias.
18 Cercano está Jehovah a los quebrantados de corazón;
él salvará a los contritos de espíritu.
19 Muchos son los males del justo,
pero de todos ellos lo librará Jehovah.
20 El guardará todos sus huesos;
ni uno de ellos será quebrantado.
21 Al impío le matará la maldad,
y los que aborrecen al justo serán desolados.
22 Jehovah redimirá el alma de sus siervos.
No serán desolados cuantos confían
en él.
Súplica de un justo calumniado
35 (Salmo de David)
1 Contiende, oh Jehovah, con los que contienden contra mí;
combate a los que me combaten.
2 Echa mano de escudo y defensa;
levántate en mi ayuda.
3 Saca lanza y jabalina al encuentro de mis perseguidores.
Di a mi alma: "Yo soy tu salvación."
4 Sean avergonzados y afrentados los que buscan mi vida;
vuelvan atrás y sean humillados los que planean hacerme daño.
5 Sean como el tamo ante el viento,
y acóselos el ángel de Jehovah.
6 Sea su camino tenebroso y resbaladizo,
y persígalos el ángel de Jehovah.
7 Porque sin causa escondieron para mí su red en un hoyo;
sin causa pusieron trampa para mi vida.
8 Alcáncele la destrucción que no imagina,
y préndale la red que él mismo escondió.
Caiga él en aquella destrucción.
9 Entonces mi alma se gozará en Jehovah,
y se alegrará en su salvación.
10 Todos mis huesos dirán:
"Oh Jehovah, ¿quién hay como tú?
Libras al pobre del más fuerte que él;
al pobre y necesitado, del que lo despoja."
11 Se han levantado testigos falsos,
y me interrogan de lo que no sé.
12 Me han pagado mal por bien.
¡Desolación para mi alma!
13 Sin embargo, cuando se enfermaron,
yo me vestí de aflicción.
Me afligí a mí mismo con ayuno,
y mi oración se volvía a mi seno.
14 Como por mi compañero,
como por mi hermano actuaba;
como el que hace luto por una madre,
enlutado me humillaba.
15 Pero cuando yo tropecé,
ellos se alegraron y se reunieron.
Se reunieron contra mí los calumniadores, sin que yo lo supiera.
Me despedazaban y no cesaban.
16 Con impiedad se dedicaron al escarnio;
crujieron sus dientes contra mí.
17 Oh Señor, ¿hasta cuándo consentirás esto?
Rescata de sus destrucciones mi alma;
libra mi única vida de los leones.
18 Te confesaré en la gran congregación;
te alabaré en medio de un pueblo numeroso.
19 No se alegren de mí los que sin razón son mis enemigos,
ni guiñen el ojo los que me aborrecen sin causa.
20 Porque no hablan paz,
y contra los mansos de la tierra traman engaños.
21 Ensanchan contra mí sus bocas, diciendo:
"¡Ajá, ajá, nuestros ojos lo han visto!"
22 Tú lo has visto.
Oh Jehovah, no calles;
oh Señor, no te alejes de mí.
23 Despierta y levántate para hacer justicia
a mi causa, Dios mío y Señor mío.
24 Oh Jehovah, Dios mío,
hazme justicia conforme a tu rectitud.
Que no se alegren de mí,
25 ni digan en su corazón:
"¡Ajá, esto es lo que queríamos!"
Ni digan: "¡Lo hemos devorado!"
26 Sean avergonzados y humillados a una
los que se alegran de mi mal.
Vístanse de vergüenza y confusión
los que se engrandecen contra mí.
27 Canten y alégrense los que están a favor de mi justa causa,
y digan siempre:
"¡Sea ensalzado Jehovah,
que se complace en el bienestar de su siervo!"
28 Mi lengua hablará de tu justicia
y de tu alabanza, todo el día.
Maldad del impío y bondad de Jehovah
36 (Al músico principal. Salmo de David, siervo de Dios)
1 La transgresión habla al impío dentro de su corazón;
no hay temor de Dios delante de sus ojos.
2 Por eso se lisonjea en sus propios ojos,
hasta que su iniquidad sea aborrecimiento.
3 Las palabras de su boca son maldad y engaño;
ha dejado de ser sensato y de hacer el bien.
4 Sobre su cama piensa iniquidad;
está en un camino que no es bueno
y no desprecia el mal.
5 Oh Jehovah, hasta los cielos alcanza tu misericordia;
y hasta las nubes, tu fidelidad.
6 Tu justicia es como las montañas de Dios;
y tus juicios, como el gran océano.
Oh Jehovah, que conservas al hombre y al animal,
7 ¡cuán preciosa es, oh Dios, tu bondad!
Por eso los hijos del hombre
se refugian bajo la sombra de tus alas.
8 Se sacian de la abundancia de tu casa;
les das a beber del torrente de tus delicias.
9 Ciertamente contigo está el manantial de la vida;
en tu luz veremos la luz.
10 Extiende tu bondad a los que te conocen,
y tu justicia a los rectos de corazón.
11 Que no venga contra mí el pie de la soberbia,
ni me mueva la mano de los impíos.
12 Entonces caerán los que obran iniquidad;
serán derribados y no podrán levantarse.
Dos conductas y dos destinos
37 (Salmo de David)
1 No te impacientes a causa de los malhechores,
ni tengas envidia de los que hacen iniquidad.
2 Porque como la hierba pronto se secan,
y se marchitan como el pasto verde.
3 Confía en Jehovah y haz el bien.
Habita en la tierra
y apaciéntate de la fidelidad.
4 Deléitate en Jehovah,
y él te concederá los anhelos de tu corazón.
5 Encomienda a Jehovah tu camino;
confía en él, y él hará.
6 El exhibirá tu justicia como la luz,
y tu derecho como el mediodía.
7 Calla delante de Jehovah,
y espera en él.
No te alteres con motivo de los que prosperan en su camino,
por el hombre que hace maldades.
8 Deja la ira y abandona el enojo;
de ninguna manera te apasiones por hacer lo malo.
9 Porque los malhechores serán destruidos,
pero los que esperan en Jehovah heredarán la tierra.
10 Dentro de poco no quedará el impío.
Contemplarás su lugar, y no aparecerá.
11 Pero los mansos heredarán la tierra
y se deleitarán por la abundancia de paz.
12 El impío maquina contra el justo
y cruje sus dientes contra él.
13 El Señor se reirá de él,
porque ve que viene su día.
14 Los impíos desenvainan la espada y entesan el arco
para derribar al pobre y al necesitado,
para matar a los de recto proceder.
15 Pero la espada de ellos entrará en su propio corazón,
y su arco será roto.
16 Mejor es lo poco del justo
que las riquezas de muchos impíos.
17 Porque los brazos de los impíos serán quebrados;
pero es Jehovah quien sostiene al justo.
18 Jehovah conoce los días de los íntegros,
y la heredad de ellos será para siempre.
19 No serán avergonzados en el tiempo malo;
en los días de hambre serán saciados.
20 Pero los impíos perecerán,
y los enemigos de Jehovah serán consumidos como el sebo de los carneros;
se disiparán como el humo.
21 El impío toma prestado y no paga,
pero el justo tiene compasión y da.
22 Los que él bendiga heredarán la tierra,
y los que él maldiga serán eliminados.
23 Por Jehovah son afirmados los pasos del hombre,
y él se complacerá en su camino.
24 Si cae, no quedará postrado,
porque Jehovah sostiene su mano.
25 Yo he sido joven y he envejecido;
pero no he visto a un justo desamparado,
ni a sus descendientes mendigando pan.
26 En todo tiempo tiene compasión y presta,
y su descendencia es para bendición.
27 Apártate del mal y haz el bien,
y vivirás para siempre.
28 Porque Jehovah ama la rectitud
y no desampara a sus fieles.
Para siempre serán guardados,
pero la descendencia de los impíos será exterminada.
29 Los justos heredarán la tierra
y vivirán para siempre sobre ella.
30 La boca del justo expresará sabiduría,
y su lengua proferirá juicio.
31 La ley de su Dios está en su corazón;
por eso sus pasos no vacilarán.
32 El impío acecha al justo
y procura matarlo.
33 Jehovah no lo dejará caer en su mano,
ni dejará que lo condenen cuando sea juzgado.
34 Espera en Jehovah y guarda su camino.
El te exaltará para heredar la tierra,
y cuando los impíos sean destruidos,
tú lo verás.
35 Yo he visto al impío enaltecido,
que se levantaba como un cedro del Líbano.
36 Pero pasó y ya no apareció.
Lo busqué, y no fue hallado.
37 Considera al íntegro y mira al justo;
que la posteridad de ese hombre es paz.
38 Pero los transgresores serán todos juntos destruidos;
la posteridad de los impíos será eliminada.
39 La salvación de los justos proviene de Jehovah;
él es su fortaleza en el tiempo de angustia.
40 Jehovah les ayudará y los librará;
les librará de los impíos y los salvará,
porque en él se han refugiado.
Plegaria en el sufrimiento
38 (Salmo de David. Para conmemorar)
1 Oh Jehovah, no me reprendas en tu furor,
ni me castigues en tu ira.
2 Porque tus flechas han penetrado en mí,
y sobre mí ha descendido tu mano.
3 No hay parte sana en mi cuerpo
a causa de tu ira;
no hay paz en mis huesos
a causa de mi pecado.
4 Porque mis iniquidades han sobrepasado mi cabeza;
como carga pesada me agobian.
5 Hieden y supuran mis heridas
a causa de mi locura.
6 Estoy encorvado y abatido en gran manera;
ando enlutado todo el día.
7 Porque mis espaldas están inflamadas,
y no hay parte sana en mi cuerpo.
8 Estoy debilitado y totalmente molido;
gimo a causa de la conmoción de mi corazón.
9 Oh Señor, delante de ti están todos mis deseos,
y mi gemido no te es oculto.
10 Mi corazón palpita fuertemente,
y mi vigor me ha abandonado.
Aun la luz de mis ojos ya no está conmigo.
11 Mis amigos y compañeros se han apartado de mi plaga;
mis parientes se han mantenido alejados.
12 Los que buscaban mi vida
armaron trampas,
y los que procuraban mi mal
profirieron amenazas.
Maquinaban fraudes todo el día.
13 Pero yo, como si fuera sordo, no escuchaba,
y era como un mudo que no abre la boca.
14 Actué como un hombre que no oye,
y en cuya boca no hay amonestación.
15 Pues en ti, oh Jehovah, he esperado;
tú responderás, oh Jehovah, Dios mío.
16 Porque dije:
"No sea que se alegren de mí,
y cuando resbale mi pie,
se enaltezcan sobre mí."
17 Porque yo estoy a punto de caer,
y mi dolor está delante de mí continuamente.
18 Por eso confesaré mi iniquidad;
me acongojaré por mi pecado.
19 Porque mis enemigos están vivos y fuertes;
se han aumentado los que me aborrecen sin motivo.
20 Los que pagan mal por bien me son hostiles,
por seguir yo lo bueno.
21 No me desampares, oh Jehovah.
Dios mío, no te alejes de mí;
22 apresúrate a socorrerme,
oh Señor, salvación mía.
La brevedad de la vida
39 (Al músico principal. A Jedutún. Salmo de David)
1 Yo dije: "Cuidaré mis caminos
para no pecar con mi lengua.
Guardaré mi boca con freno,
en tanto que el impío esté frente a mí."
2 Enmudecí, quedé en silencio;
me callé aun respecto de lo bueno,
pero mi dolor se agravó.
3 Mi corazón se enardeció dentro de mí;
fuego se encendió en mi suspirar,
y así hablé con mi lengua:
4 Hazme saber, oh Jehovah, mi final,
y cuál sea la medida de mis días.
Sepa yo cuán pasajero soy.
5 He aquí, has hecho que mis días sean breves;
mi existencia es como nada delante
de ti.
De veras, sólo vanidad es todo hombre en su gloria. (Selah)
6 En la oscuridad deambula el hombre;
de veras, en vano se inquieta por acumular,
y no sabe quién lo recogerá.
7 Ahora, oh Señor, ¿qué esperaré?
Mi esperanza está en ti.
8 Líbrame de todas mis rebeliones;
no me pongas por burla del insensato.
9 Enmudecí; no abrí mi boca,
porque tú eres quien lo hizo.
10 Aparta de mí tu plaga;
por el movimiento de tu mano soy consumido.
11 Con castigos por el pecado corriges al hombre,
y deshaces como polilla su hermosura.
Ciertamente vanidad es todo
hombre. (Selah)
12 Escucha mi oración, oh Jehovah;
oye mi clamor y no calles ante mis lágrimas.
Porque forastero soy para ti,
un advenedizo, como todos mis padres.
13 Aparta de mí tu mirada, de modo que me alegre
antes que me vaya y deje de ser.